Mañana, con la imposición de la ceniza durante la Eucaristía, comienza la Cuaresma, tiempo de conversión y preparación para celebrar la pascua de Resurrección. Se trata de un tiempo de austeridad para recibir a Dios y que tiene unos signos y símbolos fundamentales dentro de la liturgia cristiana en Nuestros templos.
Así, es como la austeridad predomina durante estos cuarenta días en nuestras Iglesias y en las vestimentas de las imágenes, especialmente las de María Santísima, con la tradicional vestimenta conocida como hebrea.
De esta manera, se presenta desde hoy Nuestra Señora de los Dolores, ataviada por su vestidor Francisco Garví, para la veneración y la recepción de los fieles y devotos en su capilla de la Parroquia de San Pedro y San Pablo.
Compartimos las imágenes de esta nueva vestimenta realizadas por nuestra hermana Cristina Bueno.
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