Mensaje de nuestro Consiliario Rvdo. Sr. D. José Gabriel Martín Rodríguez.
Queridos hermanos y amigos, cristianos cofrades. Queridos enfermos y hospitalarios.
La educación es una de las herramientas más poderosas para formar ciudadanos íntegros y comprometidos con la sociedad. En ese sentido, la clase de religión puede ser una gran aliada en la educación de nuestros hijos, al ofrecer una visión ética y moral que complementa el resto de las materias.
La religión es parte de nuestra cultura y nuestra historia, y conocerla es fundamental para entender nuestra sociedad. Además, la clase de religión fomenta valores como la solidaridad, la empatía, el respeto y la tolerancia, esenciales para la convivencia pacífica en una sociedad plural y diversa.
Asistir a la clase de religión también puede ayudar a los niños a desarrollar su sentido crítico y a reflexionar sobre temas trascendentales como la existencia, el sentido de la vida o la justicia. Estas reflexiones pueden ser de gran ayuda para su crecimiento personal y su madurez emocional.
Además, la clase de religión también puede contribuir a la formación espiritual de los niños, brindándoles herramientas para enfrentar los desafíos de la vida con serenidad y esperanza.
Por todo lo expuesto, con este cirio quiero animar a los padres a matricular a sus hijos en la clase de religión, como una oportunidad para enriquecer su formación integral y fomentar su desarrollo humano y espiritual.
Miramos a nuestros Sagrados Titulares en sus bellas y variadas invocaciones y advocaciones, y les pedimos que cambiemos nuestros puntos de vista. Nuestro compromiso también es #yomeapuntoareligion. ¡Al cielo con ella!.
Recibid un fraterno abrazo y el deseo de un mes saludable, santo, fecundo, pacífico, pacificador y esperanzador.